#DESPIERTASONORA
Los restos de Lizbeth Bracamontes Tellaeche fueron reconocidos. Estaban en una fosa clandestina ubicada en el cerro El Coyote, en la colonia Amapolas de Hermosillo.
Lizbeth tenía casi tres meses de desaparecida y ahora su familia ya podrá darle cristiana sepultura, y su angustia por saber de ella desaparecerá, pero pasará a un duelo más doloroso: su pérdida física.
Cecilia Delgado Grijalva, fundadora de Buscadoras por la Paz Sonora, informó que en ese lugar había un cuerpo más en las mismas condiciones: calcinados.
Fue a través de la prueba del ADN como se corroboró la identidad de Lizbeth, quien había desaparecido el 22 de enero de este año.