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ENTRETELONES

May 30, 2023

DESCARO

SAMUEL VALENZUELA/COLUMNISTA

#DESPIERTASONORA

Nadie podría negar que, con cargo a recursos financieros del gobierno, desde el presidente Andrés Manuel López Obrador hasta gobernadoras y gobernadores, se despliega descarada estrategia de posicionamiento electoral en favor del partido oficial o sea MORENA.

A ver, quien podría decir que no son campañas adelantadas los eventos que las corcholatas encabezan por todo el país simulando muy mal que se trata de actos institucionales y que son con cargo a las finanzas de gobiernos estatales e incluso hasta se dan el lujo de confirmarlo mediante rústicos operativos mediáticos.

Quién podría negar que desde el púlpito mañanero presidencial se realiza permanente campaña en favor del partido oficial y en contra del amplio espectro opositor, con llamados y convocatorias flagrantes para votar en el sentido de sus conveniencias en la elección del 2024.

Nadie podrá negar que desde la presidencia de la república, gubernaturas estatales y ayuntamientos se promueven campañas adelantadas con cargo al erario; se viola la constitución y el marco jurídico electoral y lo hacen con total impunidad a pesar de, como lo ha advertido el mismo presidente, tales delitos se castigan con cárcel por estar tipificados como fraude electoral.

Además de corrupción, dichos eventos se basan en la mentira y en la traición a principios democráticos elementales, pero las obsesiones del continuismo cuatrero no tienen límites, sin importarles la segura fractura social, la confrontación y el encono que se cultiva por un hombre que se cree poseedor de la verdad absoluta y que nadie puede contradecirlo porque para eso tiene a las fuerzas armadas y a sus camisas pardas.

Solo víctimas de la confusión neuronal e ideológica pueden decir que la agenda cuatrera es progresista e incluso haya quienes digan que es de izquierda, que, de ser así, sería una izquierda germinada desde el conservadurismo más conspicuo y meramente simulada para sorprender a incautos, tal como ocurre en estos días con tantas y tantos que desde los placeres de la aristocrática burocracia se desgarran las vestiduras con el slogan de primeros los pobres.

Por cierto, paradójico que tal bandera sea enarbolada por quienes viven en palacios, en fastuosas residencias y con séquitos de servidumbres, a quienes se suman los que, de la medianía de trabajos y activismos honestos en luchas populares, estudiantiles o en trincheras mediáticas, ahora son heroicos defensores de la nómina gubernamental y arietes de la élite en turno para desquitar la chuleta.

Pero volvamos al descarado cinismo de quienes utilizan recursos del erario para causas electorales, que en principio de cuentas, ya derivó en que forzadito y todo, el INE haya dictado medidas cautelares al presidente López Obrador para retirar de sus redes sociales, así como de cualquier otra plataforma electrónica y portal de internet, bajo su dominio, las declaraciones referentes a diversos programas sociales en el contexto de los procesos electorales ya que podrían poner en riesgo los principios de equidad e imparcialidad que mandata la constitución.

Podría decirse que bajo la tutela de la presidenta Guadalupe Taddei Zavala, resulta sorpresivo el que la comisión de quejas del organismo haya atendido las solicitudes cautelares del PAN y de Movimiento Ciudadano, pero más bien se trata de una enmendada de plana del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que ya dio a conocer el anteproyecto de acuerdo de mayor impacto aún, que implica la revocación de un acuerdo del INE que desechó recursos de esos mismos partidos.

Miren, la magistrada de la Sala Superior del TEPJF, Janine Otálora, propuso que se le apliquen medidas cautelares al presidente debido a sus declaraciones hechas en la conferencia mañanera en las que llamó a votar por el partido Morena, para que éste tenga mayoría calificada en el Congreso de la Unión y así logre aprobar una reforma al Poder Judicial, todo esto en el contexto de su llamado Plan C.

Dicho resolutivo revocaría el acuerdo emitido por la Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral mediante el cual se desechó la aplicación de medidas cautelares a López Obrador por este motivo, gracias a los votos de los consejeros recién ingresados al INE Jorge Montaño y Rita Bell López, obviamente mangoneados por Taddei Zavala.

No se requiere mucha sabiduría para llegar a las conclusiones de la ministra de referencia, por que resulta evidente que en las malañeras el presidente insiste en llamar a no votar y votar por opciones políticas y manifiesta abiertamente que el partido de su propiedad debe de obtener la mayoría legislativa calificada para poder hacer lo que le de la gana con la Constitución.

Sabe a quien se le podría ocurrir que los eventos en Hermosillo de Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López y Marcelo Ebrard no son actos anticipados de campaña y por ende ilegales, que junto a los posicionamientos presidenciales cotidianos ofrece un escenario delicuencial de cuellos blancos que pretende contener el TEPJF, aunque como sabemos nadie hará caso y mucho menos el presidente, quien experto en las artes de la provocación, se mantendrá como coordinador de la campaña presidencial de MORENA y seguramente emprenderá sus insidias hacia dicho tribunal.

Por cierto, resulta increíble que haya quienes aplaudan como focas la feroz embestida de López Obrador en contra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a partir de falacias como esa de que sus integrantes ganan más que él en contra del mandato constitucional, estupidez que por supuesto no es creíble de quien gana lo que le da la gana y cuyas facultades no le alcanzan para imponer condiciones a otros poderes de la unión.

Y ese golpeteo va para largo con el objeto de debilitar al órgano de control constitucional que hasta ahora ha logrado aguantar al autoritarismo y mantenerse como insignia de demócratas, progresistas, liberales y de verdaderos revolucionarios de izquierda de este país, frente a quienes representan lo peor que la ha pasado a México en los últimos años.

De todo lo anterior y más platicamos con amigo nuestro el pasado domingo, en función de sus elucubraciones respecto a lo que considera una inevitable continuidad de la 4T, sin importar lo que se perciba en redes sociales sobre un presunto hartazgo que sin duda para nada llega a las clases populares y de cuyo control gubernamental está asegurado a través de programas del bienestar, se solaza en destacar.

“Y dónde estabas en verano del 2006”, cuestionamos en son de carrilla al bragado defensor del gobierno cuatrero, que idolatra a López Obrador, que se esfuerza por quedar bien con el gobernador Alfonso Durazo Montaño y con el alcalde del municipio donde vive, pero que hasta el 2018 anduvo al garete partidista dando lo mejor de sí como simpatizante del PRI y del PAN.

Le ha ido bien y ha construido una sólida familia y patrimonio propio, logrando en MORENA mucho más que lo obtenido en sus anteriores militancias gracias a un puesto burocrático inesperado en el gobierno estatal, en donde dice abundan muchos como él y lo reconoce con un dejo de pesar quizás por que estaba frente a este común mortal.

Es que a diferencia de tantas y de tantos, quizás por su edad, él no tuvo que lidiar con los aciagos tiempos durante la guerra sucia, de la prisión, tortura y muerte, de la represión de estado contra colonos urbanos, campesinos, estudiantes y tampoco cuando López Obrador pasaba por su mejor momento, tanto mental como físico y que lo acompañaron durante el histórico plantón del Zócalo y Reforma y que ahora, al menos en Sonora, han sido desplazados por advenedizos y oportunistas.

Él no se considera advenedizo ni oportunista, pero acepta con descaro que más bien es un pragmático trepador que aprovecha oportunidades por el bien de su familia, no faltando sus recomendaciones para en lo posible hacer lo mismo, “aunque tu edad ya no de para mucho”, nos regresó la carrilla.

Más o menos en esos términos fue el cotorreo que llevó a conclusiones coincidentes: a la 4T le aguanta para al menos un sexenio más en la presidencia; aún falta para que Durazo muestre su verdadero potencial como eventual mejor gobernador de la historia de Sonora; el presidente y las corcholatas se mantendrán en campañas anticipadas independientemente lo que diga el TEPJF o la SCJN; ser de izquierda no es requisito para ser militante de MORENA, basta con simular; panistas en el gobierno del estado tienen mucha influencia en la toma de decisiones, entre otras.

La vamos a dejar de este tamaño en este lunes en el que obviamente ni las gallinas ponen, para dedicarnos a planificar nuevos proyectos en materia de comunicación y si se puede, hacerlo en algún paradisiaco pero barato destino playero, al que invitaremos a nuestro compa y su familia, ya que además de andar sobradito de lana tiene muy buena plática y mejor garganta.

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